Capítulo 5

“…And you can tell everybody, that this is your song.”- “Your Song” Moulin Rouge Soundtrack.

Encendí las luces. Ante mi se fue iluminando un estudio, donde había instrumentos por todos lados, una pequeña cabina de grabación al fondo y un gran sofá azul a la izquierda, del mismo color que las paredes.

Era mi santuario, donde sucedía toda la magia, donde componía. Nadie se imaginaba que yo, una don nadie donde las haya, escribiera canciones, y que además fueran canciones para personas importantes.

¿El por que de que no cantara mis canciones?

Sencillo. Miedo. Miedo escénico. En cuanto tenía que cantar delante de alguien se me hacía un nudo en la garganta y me paralizaba. No lo podía controlar, era superior a mis fuerzas. Solamente podía cantar delante de mi familia y de Nick y sus hermanos. Sino, es como si fuera muda.

Pero la cosa cambiaba si se trataba de tocar. Podía tocar un instrumento sin problemas… Pero mi fuerte siempre fue la cantar y componer, y no lo podía enseñar al mundo.

Por eso, aun que enseñara mis canciones al mundo, nunca las exponía con mi nombre. Las cantaban otras personas, y para esas otras personas, las escribía otra que no era yo. Sabía que algún día conseguiría superar mi miedo y cantaría delante de la gente y podría mostrarme como soy, pero hasta entonces, ese era mi trabajo, y me gustaba, además las mejores canciones me las guardaba.

Cogí mi guitarra y me senté en el gran sofá azul que había al lado de mi preciado piano.

Comencé a rozar las cuerdas, sin tocar ninguna melodía en concreto, solo dejándome llevar por lo que sentía en ese momento.

Al final acabé tocando los acordes de Hear You Me de Jimmy Eat World. La letra podía no tener mucho sentido para mi, pero la melodía tocada solamente a guitarra era increíble.

Me sobresalto el sonido del móvil. Miré la hora, las 6 y cuarto.

-Mierda! Nick! – cogí el móvil rápidamente. – Nick? Lo siento, lo siento.

-Estás en el estudio no?

-Si- dije yendo hacia la puerta mientras con una mano buscaba entre el matojo de llaves.

-No abras, entro con la llave del buzón y cuando llegue arriba te doy una pitada.

-Peta, estaré atenta. – dije colgando. Solté el móvil sobre uno de los pufs que había al lado de la puerta. Abrí y me encontré a Nick corriendo la pared para dejarla como estaba. Sabía que no me gustaba que quedara abierta.

-Hola.- dijo sonriendo y dándome un beso en la mejilla.

-Hola. -Dije regalándole yo otra mientras lo abrazaba. Nos separamos y entramos de nuevo dentro del estudio. Corrí el cerrojo de nuevo y observé como Nick sacaba su guitarra de la funda, si, había traído su guitarra y ni me había enterado. – Bueno, manos a la obra –dije cogiendo la mía y sentándome a su lado.

Estuvimos toda la tarde con su canción, que la final conseguimos acabar. Luego se quedó a cenar y le conté lo de McFly.

-Osea, que no te llegaba con conocerlos, que ahora los metes en casa? – dijo haciéndose el molesto.

-Es que soy irresistible. – dije riéndome. Nick se rió también y cuando paró una sonrisa se instaló en su cara. – Que?- pregunté.

-No se te da bien hacer de egocéntrica.

-Claro, se te da mejor a ti no?- dije enarcando una ceja.

-No. – acercó una mano a mi cara y me colocó un mechón de pelo detrás de la oreja.

“Vale, creo que esto ya lo hemos vivido”

Me levanté sonriendo y alegué que tenía sueño. Diez minutos después me encontraba saliendo por la puerta con la bolsa de la basura en la mano. Nick hacía cinco que se había marchado. Tiré la bolsa al contenedor y cuando me disponía a entrar al jardín una voz me lo impidió.

-Ey Ali! – me di la vuelta para ver a Danny cruzar la calle sonriendo y acercarse a mi.

-Hola Danny. -Dije observando esos ojos que me volvían a escrutar como hacía unas horas.

-Tirando la basura? – preguntó sonriendo.

-Si, me has pillado, yo también tiro la basura. – dije riendo.

-Lo sabía – dijo siguiéndome la corriente. – Así que no tienes novio…?

-No, ya os lo dije antes.

-Y el chico que salió antes de tu casa?

-Era Nick, mi mejor amigo.

-Tocas la guitarra? Tu amigo iba con una a la espalda.

-Si, toco la guitarra.

-Solo la guitarra?

-Y el piano… - dije pensando.

-Vaya, un día tenemos que tocar juntos.

-Tal vez, tendré que mirar, tengo la agenda muy ocupada…- dije haciéndome la interesante.

-Solo una canción y la eliges tu, venga. – dijo mirándome con cara de súplica.

-Bueno… mañana creo que tengo un hueco…

-Mañana? Perfecto, no tengo que hacer.

-Pues yo si, he quedado con un guitarrista para practicar una canción.

-Debe se muy afortunado no? – dijo sonriendo con intensidad.

-No sabes tu cuanto! – dije entrando en el jardín.

-Hasta mañana pues!

-Hasta mañana Jones.

Lo que yo no sabía es que ese fue el principio de todo.

Bueno, bueno, bueno.

Aquí ya cambian más las cosas no?

Espero que os guste, porque me cuesta mucho reescribir todo lo que llevo escrito, que no es poco la verdad. Como ya dije, gracias a los que comentan y a los que me siguen, sois unos soles <3